El gobierno acaba de modificar el impuesto de plusvalía de tal manera que solo se pagará si se ha obtenido una ganancia en la compraventa de un inmueble. Además podrá elegirse entre dos opciones la forma más beneficiosa de calcular su cuantía.
“En ningún caso se pagará el impuesto si no se obtiene ganancia en la compraventa”, aseguró la portavoz del Gobierno y ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
El decreto-ley aprobado este lunes adapta este impuesto a la sentencia del Tribunal Consticional, que hace dos semanas declaró inconstitucionales y nulos varios artículos de la Ley Reguladora de Haciendas Locales relativos a este impuesto, que se paga cuando alguien vende, dona o hereda una vivienda, con lo que los ayuntamientos se quedaron sin forma de calcularlo.
Los contribuyentes, explicó Rodríguez, podrán elegir entre dos maneras de calcular la plusvalía: una objetiva, que es multiplicando el valor catastral por una serie de coeficientes. Los coeficientes se irán regulando cada año según la evolución del mercado inmobiliario. Otra real, que resulta de la diferencia del precio de venta y el precio de adquisición.
“Es una muy buena noticia para los ayuntamientos, que podrán seguir recaudando via este impuesto y tendrán garantizada la financiación, y también para los contribuyentes que no tendrán que pagar impuestos cuando no les corresponda”, afirmó la portavoz del Gobierno, quien señaló que este nuevo impuesto entrará en vigor tras su publicación en el BOE y los ayuntamientos tendrán seis meses para adaptar sus ordenanzas.
“Evitará distorsiones en el mercado inmobiliario y devuelve la seguridad jurídica a contribuyentes y ayuntamientos”, añadió.